29.5.09

Razones

La tesis, Galleta enferma de leucemia y luego de linfosarcoma y luego durmiendo en las raíces de un árbol hasta que las noches y los días y la duda nos alcancen, Rufino solísimo y mimoso, el final de la maestría, el final del diplomado, poco trabajo que se vuelve mucho por arte de magia, yet another course (ahora de consejería), la planeación y construcción y constitución del instituto de consejería, la casa, una que otra salida con amigos, amigos en crisis cerca y lejos, un escritorio en el que parece que ya no me siento nunca, mi primer artículo sobre cuestiones de trabajo (aunque escrito en forma anónima), las ya cotidianas angustias por dinero (crisis económica global, al fin), mi primer congreso AMAI (por lo pronto como público, espero que el próximo año como ponente), un cansancio extraordinario.

Falta otra semana más a este ritmo. Después, espero regresar a mi anormalidad habitual. Me choca no escribir teniendo tanto de qué hablar.

1 comentario:

Diana dijo...

Te entiendo, justo de eso me quejaba antes de estas vacaciones forzadas, ahora añoro lo otro, en serio.