31.8.09

Feliz día, señor blog...

Por fin, después de 6 años de tener blogs en los que escribo a veces sí y a veces no, logré recordar que hay un día al año dedicado a ellos. Me parece mucho más adecuado en este año, cuando el "mundo blog" está mutando, está reabsorbiéndose y dejando ir usuarios rumbo a FB, rumbo a Twitter o de regreso a sus cabezas y libretas...

Este altar se ha transformado en una actividad esporádica, pero que disfruto enormemente. Creo, inclusive, que lo disfruto más que a bitter: en aquél la fascinación era tener lectores por primera vez y ver qué reacciones causaban mis letras. Recuerdo la temblorina de manos que producía juntar 10 comentarios, uf. Aquí el asunto es mucho más personal; estamos en confianza, de pantuflas y con un gato en el regazo, diríase. Ya no importa la cantidad, sino la fe de quienes vuelven a pesar de todo.

He ido abrazando y soltando diferentes experimentos de escritura. Por ejemplo, hace unas semanas me cuestionaba la existencia de "Más de cien motivos", y llegué a pensar en borrarme de ahí. Ese ya no es mi blog, lo que está ahí escrito ya no son mis letras (supongo que las de nadie entre todos los que alguna ve colaboraron y luego fueron abandonando el proyecto así, en silencio). Lo dejé por un principio simple: respeto a los repositorios. Sigue siendo un espacio con comentarios cada dos semanas en sus posts más populares (no entiendo por qué); si a alguien le hace sentido, adelante. Creo, igual, que en algún momento terminaré por dejarlo ir.

Lo mismo ha pasado con los blogs que leía. Hace dos semanas me cayó el veinte de que muchos de los blogs que seguía y estaban en "mis favoritos" han dejado de actualizar. Con algunos la circunstancia ya está al límite, de otros todavía tengo vagas esperanzas. En vez de abandonar, decidí que necesitaba encontrar nuevas lecturas: me he dado cuenta de que los géneros propicios al medio me gustan mucho (la crónica, el relato corto, la columna de opinión) y sí, resulta necesario darles vueltas al menos cada tercer día.

Siento —se nota— un cambio en la relación con los blogs. No sólo en la mía, en la de todo mundo. Creo que dejaron de ser el juguete de moda, o el experimento práctico. Un poco lo que decía Casciari, que desaparecen los bloggers y quedan los escritores. Y a veces también desaparecen los escritores, que regresan a su escritura privada y sin escándalos. Valoro mucho a quienes se quedan, a quienes descubro, a quienes ya no puedo leer pero que alguna vez decidieron compartir sus letras. A los que las compartieron y luego las dejaron como papalotes enredados en las ramas del árbol.

Van, pues, en honor de quienes se han quedado o han aparecido de nuevo, las recomendaciones-felicitaciones del Día Blog:

1. Stella errans: Diana es, creo, de los poquísimos amigos virtuales que conservo del blog anterior. Es una mujer extraordinaria, que además cuenta con la virtud de escribir y traducir poesía como se debe. Su blog es una muestra de lo que es y de los ases que tiene bajo la manga. No sólo disfruto su blog, la quiero.

2. Imaginemos, imaginemos: me da pena admitir que recién hace unos días di con el blog de Raquel. Digamos que cuando Alguien dijo "hágase el blog", ella llegó y empezó a escribir(se). Lleva, pues, mucho rato escribiendo, y haciendolo cada vez más y mejor. Tenía mucho tiempo que no disfrutaba tanto una lectura en línea, considerando, también, esa lectura como extensión de la persona. Ha sido un gusto dar con ella.

3. Capri, c'est fini: este fue mi primer blog de "aventura absoluta". No llegué ni por recomendación, ni por amigos en común... Llegué saltando de blog en blog, y me quedé. Admito que lo leo en bloques (dejo de leer un rato, espero a que se junten 5 o 6 posts y ya después me los aviento todos de corrido), pero eso se debe, sobre todo, a lo variados que son y a que disfruto saltar de uno a otro. Una isla para encallar sin remordimiento.

4. Skene: que sí, es como el papel de celofán: de colores pero transparente, envuelve las cosas pero deja verlas. Me encantan sus fotos, pero también sus posts, su gato, la forma en la que asume la aventura en la que ha transformado su vida... Me acuerdo de ella mejor que del conciertito en el que la conocí :)

5. Nice Fucking Graphics: mi debilidad por el diseño es evidente, y la que tengo por los datos y cosas curiosas también. En este sitio se reúnen las dos cosas con bastante gracia, y además de llenarme el ojo han contribuido a mi formación extramuros. Estimulante de múltiples maneras.

Bueno, también felicito a mis demás amigos con blog, a los que lo han dejado morir, a los que no están seguros de si van a seguir escribiendo, a los que sólo leen, a los que comentan y a los que no. Feliz Día Blog, blog...

28.8.09

Cosas que disfruto

Despertar con un gato en los pies, otro en el costado izquierdo, y R al oro lado de la cama. Darme tiempo para leer un buen libro (o dos) en semanas de caos absoluto. Mi trabajo (aunque me robe más, mucho más de 40 horas a la semana). Mis amigos (aunque no los vea, cortesía del maldito-bendito trabajo).

Poner mi ex libris en los tomos nuevos. La nostalgia molesta de las 12:54 am cuando estoy a solas en la casa. Tomar un taxi y tener tiempo para leer. Escuchar mi música. Estrenar un par de jeans.

Un buen puro una vez o dos al año. Una copa de vino. La última taza de té del día. El regaderazo de la mañana, después de una larguísima noche de insomnio. Descubrir nuevo material de lectura. Dar con la idea que no encontraba desde hace días. Reírme con (y de) mi gente. Haberme vuelto dueña de mis silencios.

Tener 5 minutos para escribir. Dejar que gente que aprecio lea los textos que más trabajo me cuestan. Ver dormir a Lola mientras escribo en la computadora. Pensar en mis exalumnos con una extraña mezcla de cariño, nostalgia y culpa por abandonarlos.

Disfruto mi vida, vaya que sí.